Bebeces, vamos a dejar el drama por los “pajaritos” o “check mark” azules. No sé por qué se siguen ahogando en un vaso de agua. Desde mucho antes de que los famosos “check mark” cambiaran de color, uno podía saber si una persona había leído o visto el mensaje. ¿No recuerdan que se puede ver la última hora en que el maldito novio tuyo entró a “Whatsapp”?
Para darte cuenta de eso, no hacía falta ser muy inteligente. Si usted dama insegura enviaba un mensaje a las 3:45 de la tarde y su amor entró a las 4:37 de la tarde, es obvio que entró a “Whatsapp” y no sólo leyó su mensaje, también leyó el de las otras amiguitas. Claro, son compañeras de trabajo, no dude tanto de él.
En fin, si desde antes de ver esas “cositas” en azul ya uno podía saber si nos “pitcheaban”, ¿por qué tanta indignación con esta nueva forma de saber (más rápido) si nos han ignorado?
Ah, se me olvidaba. El boricua está cabrón. Y le damos importancia a mierdas que al final son insignificantes. Si así como te preocupas porque tu mujer te ignora o tu amiguito no contesta; te preocuparas por salir bien en un examen o buscar un trabajo, dejarías de ser una mierda de persona. Pensemos más allá.
Amores míos, como quiera le van a lavar la cabeza dándoles excusas para que se calmen. ¿Realmente vale la pena el comerte las uñas porque no te han contestado? Si al final, con un “Bebé, lo leí, pero estaba ocupado.” te van a tranquilizar.
Hablando maduramente ( a ver si me entienden) uno tiene vida propia y por lo menos yo, no puedo estar todo el día esperando a que me escribas para contestarte al momento. Si me llega un mensaje, lo leo. Si puedo te contesto, sino, lo hago cuando realmente tenga tiempo. Eso sí, si pasan 13 horas con 46 minutos y no lo hago, sabes lo que significa. Yo seguiré contestándote cuando pueda y no cuando tú quieras.
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